La Ruta Nacional 32, corredor logístico fundamental que enlaza el Valle Central con la región Caribe de Costa Rica, ha sido objeto de cierres preventivos durante esta semana. La medida, implementada por el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y el Consejo Nacional de Vialidad (CONAVI), responde directamente al elevado riesgo que presenta la saturación de suelos en el tramo montañoso del Parque Nacional Braulio Carrillo, conocido como Cerro Zurquí.
El presente artículo detalla el fundamento técnico de esta decisión, el impacto asociado y las rutas alternas dispuestas por las autoridades.
Análisis de la Situación Actual
El cierre más reciente fue ejecutado durante la noche del martes 19 de agosto de 2025, extendiéndose hasta la mañana del miércoles 20. Esta interrupción no se debió a un derrumbe activo, sino a una acción preventiva basada en los monitoreos técnicos de las laderas.
El fenómeno causante es la saturación de suelos. Las precipitaciones constantes e intensas en la zona provocan que el material de los taludes absorba agua hasta superar su capacidad de drenaje. Esto genera dos efectos críticos:
- Pérdida de Cohesión: Las partículas del suelo pierden la fricción que las mantiene unidas, volviendo la masa de tierra inestable.
- Incremento del Peso: El agua acumulada aumenta significativamente el peso total del talud, ejerciendo una mayor presión sobre su base.
La combinación de estos factores incrementa exponencialmente la probabilidad de deslizamientos de tierra, que representan un peligro directo y grave para los vehículos que transitan por la vía. Por tanto, los cierres se decretan para salvaguardar la integridad y la vida de los conductores.
Impacto Nacional y Prioridad de la Seguridad
La Ruta 32 es la principal arteria comercial del país, canalizando un alto porcentaje de las importaciones y exportaciones que se movilizan a través de los puertos de Limón y Moín. En consecuencia, cada cierre, aunque temporal, genera un notable impacto en la cadena logística nacional, causando retrasos en la entrega de mercancías y afectando la dinámica comercial.
Asimismo, la interrupción del paso tiene un efecto social significativo sobre las comunidades del Caribe, los trabajadores que dependen de la ruta para sus traslados y el sector turístico. No obstante, las autoridades han enfatizado que la prioridad absoluta es la prevención de accidentes. La historia de la Ruta 32 incluye numerosos incidentes por deslizamientos, lo que justifica la aplicación de un estricto protocolo de seguridad ante condiciones climáticas adversas.
Guía Oficial de Rutas Alternas
Ante la posibilidad de nuevos cierres preventivos si las condiciones de lluvia persisten, las autoridades han habilitado y recomendado oficialmente las siguientes tres rutas alternas para garantizar la conexión entre el centro del país y el Caribe.
- Ruta 10 (vía Turrialba): Es la principal vía alterna designada. Se encuentra habilitada para todo tipo de vehículos, incluyendo el transporte de carga pesada. Los conductores deben prever un aumento considerable en el tiempo de recorrido.
- Ruta por Bajos de Chilamate – Vuelta de Kopper: Esta carretera también está habilitada para todo tipo de vehículos. Sirve como una conexión eficiente entre la Zona Norte y la región Caribe.
- Ruta por Vara Blanca: Es fundamental destacar que esta vía está restringida exclusivamente para el tránsito de vehículos livianos. Su topografía y características geométricas no son aptas para autobuses o camiones.
Se insta a los conductores a consultar los canales de comunicación oficiales del MOPT y CONAVI para obtener información actualizada sobre el estado de la Ruta 32 antes de iniciar cualquier desplazamiento.