Sobre el Zoológico Simón Bolívar de Costa Rica y su cierre

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Breve presentación del Zoológico Simón Bolívar

El Zoológico Simón Bolívar, ubicado en el corazón de San José, Costa Rica, fue una institución icónica que jugó un papel fundamental en la conservación de la biodiversidad y la educación ambiental durante más de un siglo. Fundado en 1921, el zoológico evolucionó a lo largo de los años para convertirse en un santuario urbano para la vida silvestre y un centro educativo de primer nivel.

Con una rica historia que se remontaba a principios del siglo XX, el Zoológico Simón Bolívar fue testigo de importantes acontecimientos en la historia de Costa Rica. En sus inicios, el zoológico era una pequeña colección de animales nativos, pero con el tiempo amplió su alcance para incluir especies de todo el mundo. A lo largo de los años, el zoológico albergó una gran variedad de animales, desde majestuosos jaguares y perezosos arborícolas hasta coloridas guacamayas y monos capuchinos.

Además de su papel en la conservación de la biodiversidad, el Zoológico Simón Bolívar también fue un importante centro educativo. El zoológico ofreció una variedad de programas educativos para niños y adultos, incluyendo visitas guiadas, talleres y campamentos de verano. A través de estos programas, el zoológico buscaba sensibilizar al público sobre la importancia de la conservación de la vida silvestre y promover un comportamiento responsable hacia el medio ambiente.

En las últimas décadas, el Zoológico Simón Bolívar experimentó una serie de cambios importantes. En 2012, el zoológico se sometió a una renovación multimillonaria que incluyó la construcción de nuevos hábitats para los animales, un centro de educación ambiental y un hospital veterinario. Estas mejoras permitieron al zoológico proporcionar un mejor cuidado a los animales y ofrecer una experiencia más enriquecedora a los visitantes.

El Zoológico Simón Bolívar fue un tesoro nacional amado y apreciado por generaciones de costarricenses y turistas. Fue un lugar donde la gente podía conectarse con la naturaleza, aprender sobre la vida silvestre y experimentar la belleza y la diversidad del mundo natural.

El zoológico cerró sus puertas el 10 de mayo de 2024, marcando el final de una era significativa en la historia de la conservación y la educación ambiental en Costa Rica.

Ubicación

Situado en el Barrio Amón, en pleno centro de San José, el Zoológico Simón Bolívar se encontraba estratégicamente ubicado para facilitar el acceso tanto a residentes como a visitantes. Su dirección exacta era Avenida 11, entre calles 9 y 11, justo al norte del centro de la ciudad. La ubicación central permitía a los visitantes combinar su visita al zoológico con otros puntos de interés cultural y turístico en la capital costarricense.

Importancia en la cultura costarricense

El Zoológico Simón Bolívar no era solo un lugar donde se exhibían animales; era una institución profundamente enraizada en la historia y cultura de Costa Rica. Desde su inauguración, desempeñó un papel crucial en la educación ambiental, enseñando a las generaciones sobre la importancia de la conservación y el respeto hacia la naturaleza. Además, fue un refugio para especies en peligro de extinción y un centro de investigación y rehabilitación de fauna silvestre.

El zoológico también era un punto de encuentro familiar y educativo, donde los padres podían enseñar a sus hijos sobre la biodiversidad de Costa Rica y la necesidad de protegerla. A lo largo de los años, fue escenario de innumerables eventos culturales y educativos, reforzando su posición como un símbolo de la dedicación del país hacia la conservación del medio ambiente.

Propósito del blog post

El propósito de este blog post es ofrecer una mirada detallada y enriquecedora sobre el Zoológico Simón Bolívar, explorando su historia, evolución y contribuciones a la sociedad costarricense. A través de este artículo, buscamos no solo informar a los lectores sobre la importancia del zoológico, sino también inspirar un mayor aprecio por los esfuerzos de conservación y educación que se realizaron en este lugar. Además, esperamos motivar a más personas a recordar y valorar el legado del zoológico y a participar activamente en la protección de la biodiversidad de Costa Rica, continuando con el espíritu de conservación que el Zoológico Simón Bolívar representó durante más de cien años.

Historia del Zoológico Simón Bolívar

Fundación y primeros años

Fecha de fundación

El Zoológico Simón Bolívar fue fundado en 1921, en una época en la que Costa Rica comenzaba a destacar por su creciente interés en la conservación de la naturaleza y la educación ambiental. Esta institución surgió como una iniciativa para promover el conocimiento y el respeto hacia la vida silvestre del país, en un momento en que la urbanización y la expansión agrícola comenzaban a afectar los hábitats naturales de muchas especies.

Contexto histórico de Costa Rica en ese momento

En la década de 1920, Costa Rica vivía una fase de transición y modernización. El país estaba avanzando en la implementación de infraestructuras básicas y la expansión de la educación pública. La creación del zoológico se enmarcaba dentro de estos esfuerzos por modernizar y educar a la población. El gobierno y diversas organizaciones civiles reconocieron la necesidad de proteger la biodiversidad única del país y de educar a los ciudadanos sobre la importancia de la conservación.

El zoológico fue establecido en una parcela de terreno en el Barrio Amón, un área que ya era conocida por su atractivo cultural y arquitectónico. Este lugar no solo proporcionaba un hogar para los animales, sino que también se convirtió en un centro de recreación y aprendizaje para las familias y las escuelas locales.

Objetivos iniciales del zoológico

Desde su fundación, el Zoológico Simón Bolívar tuvo varios objetivos clave:

  1. Conservación: Proteger y preservar las especies nativas de Costa Rica, muchas de las cuales ya estaban en peligro debido a la caza y la destrucción de hábitats.
  2. Educación: Proveer una plataforma educativa para que los costarricenses, especialmente los jóvenes, pudieran aprender sobre la fauna y flora del país. Esto incluía la realización de visitas escolares, charlas educativas y talleres.
  3. Investigación: Facilitar la investigación científica sobre la vida silvestre y los ecosistemas locales, colaborando con universidades y otras instituciones educativas.
  4. Recreación: Ofrecer un espacio recreativo y educativo para las familias, donde pudieran disfrutar y aprender al mismo tiempo.

Durante sus primeros años, el zoológico se centró en la colección y exhibición de animales nativos de Costa Rica. Esto no solo tenía el objetivo de entretenimiento, sino que también buscaba sensibilizar a la población sobre la importancia de proteger estas especies. La presencia de animales emblemáticos, como jaguares, pumas y diversas aves tropicales, ayudó a consolidar el zoológico como un importante centro cultural y educativo en San José.

El Zoológico Simón Bolívar, desde sus inicios, reflejó el compromiso de Costa Rica con la conservación de su rica biodiversidad y la educación de su población sobre la importancia de vivir en armonía con la naturaleza. Este enfoque visionario sentó las bases para lo que se convertiría en una de las instituciones más queridas y respetadas del país.

Desarrollo y evolución

Cambios a lo largo de las décadas

Desde su fundación en 1921, el Zoológico Simón Bolívar experimentó numerosos cambios y adaptaciones que reflejaron el crecimiento y la evolución de Costa Rica en términos de conservación y educación ambiental. A lo largo de las décadas, el zoológico amplió su alcance y mejoró sus instalaciones para responder a las necesidades cambiantes de la fauna y del público.

  • Años 1930-1940: En sus primeras décadas, el zoológico comenzó a consolidarse como un importante centro de atracción en San José. Se realizaron las primeras expansiones, añadiendo más espacio para albergar una mayor variedad de animales. Se crearon programas educativos básicos, y el zoológico empezó a recibir visitas escolares regulares.
  • Años 1950-1960: Durante estos años, el zoológico se enfocó en mejorar las condiciones de vida de los animales. Se introdujeron nuevos hábitats más naturales y se aumentaron las medidas de bienestar animal. Además, el zoológico empezó a colaborar con instituciones internacionales, lo que permitió intercambios de animales y conocimientos.
  • Años 1970-1980: Esta época marcó un punto de inflexión con la creciente conciencia global sobre la conservación. El Zoológico Simón Bolívar adoptó un rol más activo en programas de conservación y reproducción de especies en peligro. Se implementaron proyectos de cría en cautiverio para especies nativas amenazadas.
  • Años 1990-2000: La tecnología y la investigación científica comenzaron a jugar un papel más importante en las operaciones del zoológico. Se establecieron programas de investigación en colaboración con universidades locales e internacionales. Además, se inauguraron nuevas exhibiciones educativas interactivas para atraer y educar a un público más amplio.
  • Años 2010-2020: En 2012, el zoológico se sometió a una renovación multimillonaria que incluyó la construcción de nuevos hábitats, un centro de educación ambiental y un hospital veterinario. Estas mejoras permitieron un mejor cuidado de los animales y una experiencia más enriquecedora para los visitantes. El enfoque en la conservación y la educación se intensificó, con más programas comunitarios y escolares.

Impacto en la comunidad y en la conservación de la fauna

El Zoológico Simón Bolívar tuvo un impacto significativo tanto en la comunidad local como en los esfuerzos de conservación a nivel nacional e internacional.

  • Impacto en la comunidad: El zoológico sirvió como un espacio de recreación y educación para generaciones de costarricenses. Fue un lugar donde las familias podían aprender sobre la vida silvestre de una manera accesible y divertida. Los programas educativos del zoológico, incluidos talleres y visitas guiadas, jugaron un papel crucial en la sensibilización del público sobre la importancia de la conservación. Además, el zoológico generó empleo y apoyó la economía local a través del turismo.
  • Conservación de la fauna: El zoológico se destacó por sus esfuerzos en la conservación de especies nativas en peligro. A través de programas de cría en cautiverio y rehabilitación, ayudó a preservar varias especies amenazadas. El trabajo del zoológico en investigación y colaboración con otras instituciones también contribuyó al conocimiento y la conservación de la biodiversidad de Costa Rica. Especies como el jaguar, el puma y varias aves tropicales encontraron en el Zoológico Simón Bolívar un refugio seguro y una oportunidad para sobrevivir y reproducirse.

El cierre del Zoológico Simón Bolívar el 10 de mayo de 2024 marcó el fin de una era, pero su legado perdura en las generaciones que inspiró y en los numerosos esfuerzos de conservación que promovió. La historia del zoológico es un testimonio de la dedicación de Costa Rica a la protección de su biodiversidad y a la educación ambiental.

Personajes Clave en la Historia del Zoológico

Fundadores y primeros directores

Biografías breves

  • Dr. Rafael Lucas Rodríguez: Uno de los fundadores del Zoológico Simón Bolívar, el Dr. Rodríguez fue un destacado naturalista y educador costarricense. Su pasión por la flora y fauna del país lo llevó a ser una figura central en la creación del zoológico. Su visión era no solo crear un lugar de exhibición de animales, sino también un centro de educación y conservación.
  • Enrique Herrera, Primer Director: Enrique Herrera, el primer director del zoológico, jugó un papel crucial en la implementación de la misión original del zoológico. Con formación en biología y experiencia en la gestión de instituciones educativas, Herrera trabajó incansablemente para establecer programas educativos y de conservación en los primeros años del zoológico.

Contribuciones significativas

  • Dr. Rafael Lucas Rodríguez: Su principal contribución fue la creación de un espacio donde se pudieran proteger y estudiar las especies nativas de Costa Rica. También promovió la idea de la educación ambiental, sentando las bases para los programas educativos que se desarrollarían en el futuro.
  • Enrique Herrera: Bajo su liderazgo, el zoológico comenzó a expandirse y a diversificar su colección de animales. Herrera también estableció las primeras colaboraciones con escuelas y universidades, integrando el zoológico en la comunidad educativa de Costa Rica.

Conservacionistas y biólogos destacados

Proyectos importantes liderados

  • Dra. María Elena Gutiérrez: Una reconocida bióloga especializada en mamíferos tropicales, la Dra. Gutiérrez fue directora del zoológico en la década de 1980. Lideró varios proyectos de conservación, incluyendo un programa de cría en cautiverio para jaguares, que ayudó a aumentar la población de esta especie en peligro de extinción en Costa Rica.
  • Dr. Carlos Quesada: Especialista en aves tropicales, el Dr. Quesada trabajó en el zoológico durante los años 1990 y fue instrumental en el desarrollo del aviario del zoológico. Su proyecto de conservación de guacamayas verdes y rojas no solo ayudó a proteger estas especies, sino que también educó al público sobre la importancia de las aves en los ecosistemas tropicales.

Impacto en la fauna y flora costarricense

  • Dra. María Elena Gutiérrez: Su trabajo con los jaguares no solo ayudó a estabilizar la población de esta especie en Costa Rica, sino que también promovió la importancia de los grandes carnívoros en los ecosistemas. Además, su enfoque en la conservación de mamíferos tropicales inspiró a otros biólogos y conservacionistas a seguir sus pasos.
  • Dr. Carlos Quesada: El proyecto de conservación de guacamayas liderado por el Dr. Quesada tuvo un impacto significativo en la protección de estas aves icónicas. A través de su trabajo, se desarrollaron programas de educación comunitaria que enseñaron a los locales a valorar y proteger las guacamayas y sus hábitats.

El Zoológico Simón Bolívar fue un crisol de talento y dedicación, donde numerosos conservacionistas y biólogos dejaron su huella a través de proyectos innovadores y de gran impacto. La labor de estos personajes clave no solo benefició a las especies que protegieron, sino que también dejó un legado duradero de compromiso con la conservación y la educación ambiental en Costa Rica.

Esfuerzos de Conservación y Educación

Programas de conservación

Especies protegidas

El Zoológico Simón Bolívar fue pionero en la protección de diversas especies nativas de Costa Rica, muchas de las cuales estaban amenazadas por la pérdida de hábitat y la caza. Entre las especies protegidas se encontraban:

  • Jaguar (Panthera onca): Considerado el felino más grande de América, el jaguar se enfrentaba a una disminución drástica de su población. El zoológico estableció programas de cría en cautiverio para garantizar la supervivencia de esta majestuosa especie.
  • Guacamaya roja (Ara macao): Esta vibrante ave tropical, conocida por sus colores llamativos, fue objeto de un programa de conservación que incluía la cría y posterior reintroducción en áreas protegidas.
  • Puma (Puma concolor): Similar al jaguar en términos de amenazas, el puma fue otra especie que se benefició de los esfuerzos de conservación del zoológico.

Proyectos exitosos de reintroducción

  • Reintroducción de guacamayas rojas: Uno de los proyectos más exitosos del zoológico fue la reintroducción de guacamayas rojas en las selvas costarricenses. A través de programas de cría en cautiverio y liberación controlada, el zoológico ayudó a incrementar la población de esta especie en su hábitat natural.
  • Liberación de tortugas marinas: En colaboración con organizaciones locales e internacionales, el zoológico participó en programas de protección y liberación de tortugas marinas, especialmente la tortuga carey y la tortuga verde, que enfrentan numerosas amenazas en las costas de Costa Rica.

Educación ambiental

Iniciativas educativas

El Zoológico Simón Bolívar siempre priorizó la educación ambiental como uno de sus pilares fundamentales. Las iniciativas educativas se diseñaron para aumentar la conciencia sobre la importancia de la conservación y el respeto por la naturaleza.

  • Visitas guiadas: El zoológico ofrecía visitas guiadas diarias, donde los educadores ambientales proporcionaban información detallada sobre las diferentes especies y los esfuerzos de conservación en curso. Estas visitas eran especialmente populares entre las escuelas locales.
  • Talleres y campamentos de verano: Durante las vacaciones escolares, el zoológico organizaba talleres y campamentos que permitían a los niños aprender sobre la fauna y la flora de Costa Rica de manera interactiva y divertida.
  • Programas de voluntariado: El zoológico también ofrecía programas de voluntariado para estudiantes universitarios y miembros de la comunidad, proporcionando una valiosa experiencia práctica en conservación y manejo de animales.

Colaboraciones con escuelas y universidades

El Zoológico Simón Bolívar mantenía estrechas colaboraciones con instituciones educativas para promover la investigación y la educación ambiental.

  • Colaboración con universidades: Se establecieron acuerdos con universidades locales e internacionales para realizar investigaciones sobre la fauna y flora de Costa Rica. Estos proyectos incluían estudios sobre comportamiento animal, ecología y biología de la conservación.
  • Programas de educación ambiental en escuelas: El zoológico trabajaba con las escuelas locales para integrar la educación ambiental en el currículo. Los educadores del zoológico visitaban las escuelas para dar charlas y talleres, y las escuelas organizaban excursiones al zoológico para complementar su aprendizaje.

El compromiso del Zoológico Simón Bolívar con la conservación y la educación ambiental dejó una huella indeleble en la sociedad costarricense. A través de sus programas de conservación y sus iniciativas educativas, el zoológico no solo protegió a numerosas especies, sino que también cultivó una cultura de respeto y aprecio por la naturaleza entre las generaciones presentes y futuras.

Instalaciones y Exhibiciones

Descripción de las instalaciones actuales

Hasta su cierre el 10 de mayo de 2024, el Zoológico Simón Bolívar contaba con instalaciones modernas y bien diseñadas que ofrecían un entorno adecuado tanto para los animales como para los visitantes. Las renovaciones realizadas en 2012 transformaron el zoológico, mejorando significativamente la calidad de los hábitats y las facilidades disponibles.

Áreas temáticas y hábitats recreados

El zoológico se organizaba en varias áreas temáticas, cada una diseñada para replicar los hábitats naturales de las especies que albergaban. Estas áreas incluían:

  • Selva Tropical: Un hábitat exuberante que recreaba la densa vegetación de las selvas costarricenses. Aquí se encontraban especies como jaguares, pumas y diversas aves tropicales.
  • Sabana Africana: Aunque centrado en la fauna costarricense, el zoológico también tenía una sección dedicada a especies africanas, como jirafas y cebras, para educar a los visitantes sobre la biodiversidad global.
  • Humedales: Un área diseñada para replicar los ecosistemas acuáticos de Costa Rica, hogar de cocodrilos, tortugas y aves acuáticas.
  • Bosque Nublado: Esta sección albergaba especies adaptadas a las condiciones húmedas y frescas de los bosques nublados, como quetzales y monos aulladores.

Comodidades para visitantes

El zoológico estaba equipado con una serie de comodidades para asegurar una visita agradable y educativa:

  • Centro de Educación Ambiental: Un espacio dedicado a talleres, charlas y exposiciones interactivas sobre conservación y biodiversidad.
  • Hospital Veterinario: Visible al público, donde los visitantes podían aprender sobre el cuidado y la rehabilitación de los animales.
  • Áreas de descanso y picnic: Espacios sombreados y cómodos para que las familias pudieran descansar y disfrutar de un almuerzo al aire libre.
  • Cafetería y tienda de regalos: Ofrecían comidas ligeras, bebidas y recuerdos relacionados con la vida silvestre y la conservación.

Exhibiciones destacadas

Animales emblemáticos

El Zoológico Simón Bolívar albergaba una serie de animales emblemáticos que eran el orgullo de la institución y los favoritos de los visitantes:

  • Jaguares: Conocidos por su majestuosidad y fuerza, los jaguares eran una de las principales atracciones. El zoológico participaba activamente en programas de cría para esta especie en peligro.
  • Guacamayas rojas y verdes: Estas coloridas aves eran un símbolo de la biodiversidad tropical y se exhibían en un aviario diseñado para replicar su hábitat natural.
  • Perezosos: Estos icónicos animales de movimiento lento eran un gran atractivo, especialmente para los niños.
  • Monos capuchinos: Conocidos por su inteligencia y curiosidad, los capuchinos eran parte de exhibiciones interactivas que demostraban sus habilidades naturales.

Programas interactivos

El zoológico ofrecía varios programas interactivos para enriquecer la experiencia de los visitantes:

  • Alimentación de animales: Actividades programadas donde los visitantes podían observar y, en algunos casos, participar en la alimentación de ciertos animales, bajo la supervisión del personal del zoológico.
  • Talleres educativos: Sesiones interactivas donde los visitantes aprendían sobre diferentes aspectos de la vida silvestre, la conservación y el medio ambiente.
  • Noches en el zoológico: Eventos especiales que ofrecían una perspectiva única de los comportamientos nocturnos de los animales, acompañados de charlas educativas y recorridos guiados.

Las instalaciones y exhibiciones del Zoológico Simón Bolívar no solo proporcionaron un hogar seguro para muchas especies, sino que también ofrecieron una plataforma educativa inigualable para miles de visitantes. A través de sus áreas temáticas y programas interactivos, el zoológico logró conectar a las personas con la naturaleza y fomentar una mayor apreciación por la conservación de la biodiversidad.

Reubicación de los animales al ZooAve

Con el cierre del Zoológico Simón Bolívar en mayo de 2024, uno de los desafíos más importantes fue garantizar el bienestar de los animales que habían llamado hogar al zoológico durante muchos años. Afortunadamente, ZooAve, un reconocido centro de rescate y rehabilitación de fauna silvestre en Alajuela, Costa Rica, asumió la responsabilidad de acoger y cuidar a estos animales.

Proceso de reubicación

  • Evaluación de salud y bienestar: Antes de la reubicación, cada animal fue sometido a una exhaustiva evaluación de salud para asegurar que estuvieran en condiciones óptimas para el traslado.
  • Traslado seguro: Los animales fueron transportados cuidadosamente al ZooAve utilizando vehículos especializados para minimizar el estrés y asegurar su seguridad durante el traslado.
  • Adaptación a nuevos hábitats: Al llegar a ZooAve, los animales fueron introducidos gradualmente a sus nuevos hábitats, diseñados para replicar sus ambientes naturales y facilitar su adaptación.

Impacto en ZooAve

  • Expansión de instalaciones: ZooAve amplió sus instalaciones para acomodar a los nuevos residentes, asegurando que cada especie tuviera el espacio y el entorno adecuados para prosperar.
  • Programas de conservación y educación: Los programas de conservación y educación de ZooAve se enriquecieron con la inclusión de los animales del Zoológico Simón Bolívar, ofreciendo nuevas oportunidades para la educación del público y la investigación científica.

La reubicación de los animales del Zoológico Simón Bolívar al ZooAve no solo garantizó su continuo cuidado y bienestar, sino que también permitió que el legado de conservación y educación del zoológico perdurara en un nuevo entorno, continuando así su misión de proteger la biodiversidad de Costa Rica.

Desafíos y Futuro del Zoológico

Desafíos actuales

Problemas de financiamiento

Uno de los desafíos más persistentes que enfrentó el Zoológico Simón Bolívar a lo largo de su existencia fue el financiamiento. Como una institución dedicada a la conservación y la educación, dependía en gran medida de fondos públicos, donaciones privadas y los ingresos generados por la venta de entradas y eventos especiales. Sin embargo, varios factores complicaron el mantenimiento de un flujo constante de recursos:

  • Dependencia de fondos públicos: Aunque el gobierno costarricense apoyó al zoológico durante muchas décadas, las fluctuaciones en los presupuestos estatales y las prioridades cambiantes a veces resultaron en recortes significativos de financiamiento.
  • Competencia por donaciones: Con el creciente número de organizaciones y proyectos de conservación en Costa Rica, el Zoológico Simón Bolívar tuvo que competir por donaciones y subvenciones, lo cual no siempre fue fácil.
  • Ingreso por visitantes: Aunque el zoológico era una atracción popular, las visitas podían variar considerablemente según la temporada, afectando la estabilidad financiera.

Críticas y controversias

A lo largo de los años, el Zoológico Simón Bolívar no estuvo exento de críticas y controversias, las cuales influyeron en su percepción pública y en sus operaciones:

  • Condiciones de vida de los animales: Algunos críticos señalaron que las instalaciones del zoológico no siempre proporcionaban el espacio y las condiciones ideales para ciertos animales, especialmente especies de gran tamaño como los felinos. Aunque las renovaciones de 2012 mejoraron significativamente las condiciones, las críticas persistieron en algunos sectores.
  • Debate sobre la ética de los zoológicos: En las últimas décadas, el debate global sobre la ética de mantener animales en cautiverio se intensificó. Los defensores argumentaron que los zoológicos juegan un papel crucial en la conservación y la educación, mientras que los opositores sostenían que los animales merecen vivir en su hábitat natural.
  • Manifestaciones y presión de grupos activistas: Varias organizaciones de derechos de los animales y activistas llevaron a cabo manifestaciones y campañas para cerrar el zoológico o reformarlo. Estas actividades, aunque bien intencionadas, a menudo crearon un ambiente de controversia pública.

A pesar de estos desafíos, el Zoológico Simón Bolívar dejó un legado duradero en la conservación y la educación ambiental en Costa Rica. El cierre en mayo de 2024 marcó el fin de una era, pero también abrió la puerta a nuevas oportunidades para la conservación en el país, como lo demostró la exitosa reubicación de los animales en ZooAve. Este traslado no solo garantizó el bienestar de los animales, sino que también permitió que los programas educativos y de conservación continuaran evolucionando y prosperando en un nuevo entorno.

El futuro de la conservación en Costa Rica sigue siendo prometedor, gracias en gran parte a las bases establecidas por instituciones pioneras como el Zoológico Simón Bolívar. La misión de proteger la biodiversidad y educar a las generaciones futuras continúa viva, inspirada por el legado de aquellos que dedicaron sus vidas a la causa.

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